RESUMEN

La sobre masificación de los espacios naturales de Cataluña es una problemática en aumento, especialmente en los ambientes forestales protegidos, donde los visitantes acuden atraídos por el paisaje y para realizar actividades de ocio en la naturaleza. Estos espacios pertenecen a municipios, mayoritariamente rurales, que sufren el fenómeno de la despoblación, pero que a su vez experimentan episodios estacionales o puntuales de alta frecuentación.

Como consecuencia de la ausencia de regulación de estos espacios, los usuarios los han visitado sin ninguna normativa de uso concreta, ni ningún modelo de gestión de uso público que tenga en cuenta la perspectiva ambiental. Este hecho puede generar un impacto negativo sobre los espacios forestales y afectar a su biodiversidad, además de generar conflictos sociales a los habitantes de los municipios afectados.

Se pueden ver afectados por la sobre frecuentación espacios con hábitats de interés prioritario y especies de fauna y flora protegida, que pueden sufrir los efectos de la degradación del medio debido a los desechos , la contaminación acústica, la erosión, la eutrofización del agua o la introducción de especies invasoras. Esto puede ocasionar un desplazamiento o, incluso, desaparición de las especies, ocasionando una pérdida de riqueza y de diversidad.

Actualmente, la problemática de la masificación aumenta como consecuencia de la difusión de imágenes, vídeos y de las localizaciones de los espacios forestales a través de internet o de las diferentes redes sociales.

Sólo algunos municipios afectados han implementado regulaciones en el uso de estos espacios, de manera que no se ha unificado ningún modelo de uso público de los espacios forestales. Se presenta así la necesidad de asumir la creación de un modelo de gestión que tenga en cuenta la gestión activa de la frecuentación.

Este modelo debe enfocar, por un lado, la problemática desde la perspectiva de la sostenibilidad, de manera que conduzca hacia un modelo de turismo forestal sostenible que dé respuesta al reto demográfico de los municipios afectados, con el objetivo de evitar la masificación y desestacionalizar el turismo, a la vez que se están generando destinos de alta calidad en bosques resilientes que mejoren la experiencia de los visitantes y aseguren el desarrollo económico de los territorios rurales fijando población en los municipios minimizando los impactos sobre el medio.